Exhalo la vida
que aún pretendo
agarrar con mis manos
entre las luces
que vislumbro
tembloroso de mi sombra
de mis sueños
y de las horas,
que paso contemplando
el murmullo del silencio
de tu ausencia
y de mis años,
no puedo vivir mas
que por mi engaño
por la luz que ciega
mis ojos
muriendo al atardecer
para que el tiempo
me agote
y me de descanso,
para que pueda yacer
mi propósito
el que mis ojos
quieren volver a ver
tus alas cerradas
sobre mí
como eclipsando
mi muerte,
para que yo
no sienta morir
ni dejar de vivir
en tus manos.